jueves, marzo 24, 2005

Intromisión (las malas jugadas de las hormonas)

Abrazo el monitor como si fueras tu.
Es desesperante saber, que todo esto es como un incendio provocado. Yo me quemo y yo misma lo provoque. Que estupida ¿verdad?. Hasta cuando voy a seguir el engaño.

Tengo miedo, miedo de la verdad ... de la soledad que la acompaña... Sin tus ojos, sin tu alma.

¿Como es posible?, en que vara me he enrredado. Perdona si te arrastro, no quisiera apartarte de mi lado. Si quieres volar, vuela. No te detengo y no es por que no quiera, es por que no quiero lastimar tu vuelo.

Se que te lastimo con todo esto. PERDONAME. Asi soy yo, villana involuntaria de toda la vida.

Fria, sobrebia, egoista... EGOISTA, ¿te acuerdas?. AL final tuviste razón. Quiero volver el tiempo atras, no pensar que todo esto aguardaba, toda esta confusion de amar... amar a todo y a medias...

Esucho a Bonnie, y es tan triste todo. Y no es lastimera la canción pero invento una letra, a falta del idioma.

Me siento mejor, presiento que pronto moriré... Un abseso, un paro... no sé. Algo del corazón, seguro.

Y quiero descansar en paz. Por favor, dime que me predonas, que me amas y que nunca vas a dejar de ser mío...

Yo voy a seguir aqui.

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Ayer, tuve un pequeño ataque de histeria-depresión. Siento que son mis hormonas las que me juegan esas malas pasadas... Es injusto y al mismo tiempo me hago justicia por mi propia mano. Despúes de todo es uno mismo el que se construye ese destino tan imbecil ¿no creen?.

Mi pa' aun no me habla bien. Ni yo a él. Siento que fue injusto. Cuando uno mete la pata no basta con decir PERDON si las consecuencias NO SON irreversibles?. Él se equivoca pero no sabe a quien decirle perdon, quizá se lo pida a él mismo. Cada vez me convenzo mas de que soy una persona que necesita excesivas cantidades de amor, TONELADAS... Y me pregunto a veces si será una sola persona capaz de cubrir todos esos sombrios recovecos... quizá no, tal vez si. A veces siento que amo, que amo con todas mis fuerzas... pero entonces desaparece, se pierde en una esquina de la ciudad... de la provincia... Y me vuelvo a sentir vulnerable, estupida... tonta... No sé por qué. -¿Me querrá?... ¿deveras me querrá?- me pregunto con un tono antisonante.

Es una duda que quizá me quede siempre; no me atrevo a enfrentarme a la realidad, ni por él ni por nadie más. Soy tan miedosa de las consecuencias... Quizá termine destruyendome a mi misma, antes de destruirlos con la verdad... Es probable... y ahora solo me queda caminar, derecha, erguida y mirando al frente. Deseando un corazón de metal.

1 comentario:

Anónimo dijo...

No lo se, es impresionante lacapacidad de amar que tenes, misma capacidad que después transformas en otros sentimientos (olvido, decepción, solo recuerdos de cariño), todos los tenemos y quizá todos lo capoteamos diferente.
Por mi parte me gusta creer que no es necesario pedir perdon, con hablar es mas que suficiente (siempre que te den la oportunidad). Que aunque el sentimiento no siempre es el mismo, siempre esta ahi, creciendo y transformandose, sin acabarse nunca...

Soy Master...